martes, 5 de noviembre de 2024

Agfa Flexilette

 


Como ya expuse en la entrada sobre las Karat 12, tengo la creencia de que Agfa siempre fue considerada una segunda marca, pero quizá por eso precisamente -para demostrar lo contrario a sí mismos, al mercado y a los aficionados a la fotografía del siglo XX- de cuando en cuando ponían en marcha soluciones originales y con no poco mérito en el difícil equilibrio entre la innovación y la rentabilidad económica. Una de estas soluciones originales es la cámara que nos ocupa, la Flexilette; tan original que sólo he encontrado nueve ejemplos  históricos semejantes (incluyendo la Contaflex de 1935), dos de ellos de la propia Agfa y objeto de esta breve reseña (claro que siempre hay quien ya le ha echado un rato al asunto). Por abreviar la presentación: la Flexilette es una TLR (Twin Lens Reflex) de formato 135.

Debo reconocer que, en fotos y a primera vista, la cámara me parecía más que rara, un adefesio; pero fue al tratar de informarme sobre ella, que cada vez me parecía más interesante y se acrecentaba en mí el deseo de tenerla entre las manos.

El nombre de Flexilette se debe seguramente a la fusión de su característica principal: ser reflex (de hecho, la Flexilette también se denominó Agfa Reflex en algunos mercados) con el recuerdo de la larga y variada serie de las Silette, cámaras que Agfa fabricó entre 1953 y 1970 y que tiene como mejor representante la Ambi Silette, una telemétrica de objetivos intercambiables. Para Agfa, la Flexilette perseguía un doble objetivo: innovación y competitividad; lo primero evidentemente era ser una TLR de formato 135, para lo segundo tuvo que reducir gastos -pese a una innegable calidad de construcción (y un peso de 750 gr. en concordancia)- y así, por ejemplo, el excelente obturador Prontor Special (hasta 1/500 seg.) carece de temporizador. A cambio de ello, la característica destacada, ser reflex, estaba muy cuidada y la imagen en la pantalla del visor de cintura disponía de un telémetro de imagen partida, como las reflex avanzadas de la época (la Flexilette se lanzó en 1960). Por la misma razón seguramente -reducción de costes- a una cámara tan innovadora, Agfa no le dotó de un objetivo Solinar (el Tessar de la marca), si no de un modesto -aunque competente- Apotar 2,8/45 mm., del que hay buenas referencias, como ésta

Se leía en en texto publicitario de la Flexilette de 1960: Éste es un tipo completamente nuevo de cámara réflex de doble lente para el formato de 35 mm. Aquí se tiende un puente entre los partidarios del sistema réflex de dos lentes y los fanáticos del formato de 35 mm. El precio sorprendentemente bajo de 199 DM por una cámara TLR es una verdadera sorpresa: una nueva prueba del rendimiento de la fábrica Agfa Camera. El equipamiento óptico: La Flexilette cuenta con el probado Agfa Color-Apotar 2,8/45 mm doblemente: como objetivo de toma y como objetivo visor. Igualmente, en el libro de 1962 Color Photography (de Cristopher Trent; para ese año seguramente ya se había detenido la producción de la Flexilette), se dice lo siguiente: La empresa Agfa ha realizado una incorporación interesante a la gama de cámaras de 35 mm con la Flexilette, que lleva la fotografía en color de 35 mm al mundo de la cámara réflex de doble lente con un coste relativamente pequeño. Agfa ha producido muchas cámaras excelentes pero pocas más versátiles que ésta. Está equipada con dos objetivos Agfacolor Apotar idénticos de f/2.8, uno para el visor y otro para la toma, especialmente diseñados para trabajos en color pero igualmente adecuados para fotografía en blanco y negro. Tiene un telémetro muy competente, un obturador Prontor con velocidades de un segundo a 1/500, el mecanismo de bloqueo habitual para evitar la exposición doble y muchas otras mejoras, pero su principal mérito para el aficionado es su visor réflex, que proporciona una imagen clara del sujeto que se va a fotografiar viendo sus colores naturales. Podríamos añadir que el hecho de ver con plena luminosidad y en todo momento (incluso durante la exposición) al sujeto fotografiado es una de los principales ventajas de la solución TLR.

En cuanto a la ergonomía (con criterios de hoy), si nos olvidamos del peso y de una cierta criticidad en el proceso de enfoque -hay que enfocar con el ojo MUY perpendicular a la pantalla de enfoque y MUY cerca de la lupa si ésta es utilizada- digamos que todos los mandos de un cámara que carece de fotómetro están muy inteligentemente situados en el cilindro que contiene los dos objetivos -el visor y el de toma- aunque lo cierto es que cuesta algo acostumbrarse: el primer aro de control -al más próximo al cuerpo de la cámara- corresponde a las velocidades y se acciona mediante dos apósitos de plástico diametralmente opuestos, el segundo el diafragma y el tercero al enfoque, ambos con aros de distinto grosor y estriado. Esto es todo (y para un verdadero fotógrafo, aficionado o no, suficiente). Al mover el aro de enfoque, ambos objetivos se mueven simultáneamente, lo natural en una TLR. No he mencionado que la cámara dispone de un método alternativo de encuadre -que no de enfoque- desplegando la lupa (apartándola del frontal del parasol del visor) y con la ayuda de un sistema telescópico de visión directa, único método práctico  para fotografiar en formato vertical (la mayoría de las TLR en película 120 no tienen ese problema al tratarse de un formato cuadrado de 6x6). Dispone de una toma PC para sincronizar un flash, pero no de zapata donde instalarlo. lo que se solucionó posteriormente en la Agfa Optima Reflex.

Pese a todo lo expuesto, la cámara fue un semifracaso comercial y Agfa la sustituyó al cabo de un sólo año por la Agfa Optima Reflex (Optima era la gama de Agfa dedicada a las cámaras automáticas, que luego se conocieron como Point and shoot (Apuntar y disparar)) que intentó añadir características más apreciadas por el usuario común (pero desvirtuando bastante la idea original): el visor de cintura se sustituyó por un pentaprisma fijo -sin posibilidad de intercambiarlo con uno de cintura como en las primeras EXA o la propia Agfaflex- y para el automatismo de la exposición se añadió un fotómetro de selenio que incorporaba una señalización a través del visor (señal negra = falta avance de la película; señal roja = luz insuficiente; señal verde = luz suficiente). También el disparador se situó conforme a la moda de la época en el frontal a la derecha de los objetivos y se dotó a la cámara de una zapata fría para flash. Curiosamente, a día de hoy, una Flexilette es muy posible que resulte todavía funcional mientras una Agfa Optima Reflex no, ya que al tratarse de una cámara automática, si falla la célula de selenio -y es normal que eso ocurra después de 60 años-  la cámara sólo dispara en modo flash, permitiendo la elección del diafragma, pero con una sola velocidad fija (1/30 seg. según el manual); evidentemente se simplificaron los controles, reduciéndose al enfoque y a la elección entre el modo Automático, el modo flash y la posición B (en la que también se puede seleccionar el diafragma). Al tratarse de una cámara automática no se sabe la combinación diafragma/velocidad utilizada, pero sí que la velocidad máxima del obturador es 1/300 seg. (inferior a la de la  Flexilette) y la mínima de 1/30 seg.; el diafragma, también de forma automática estará entre f/2,8 y f/22, evidentemente (según McKeown y otros el programa del automatismo está diseñado para favorecer velocidades de obturación rápidas a expensas de la apertura). La Agfa Otptima Reflex estuvo fabricándose entre 1961 y 1966. Para coleccionistas, entre la Flexilette y la Optima Reflex quizá la última se cotice algo más, pero entre los que pretenden fotografiar hoy con cámaras antiguas, se prefiere la Flexilette por las razones apuntadas. A continuación una imagen de ambas, donde pueden apreciarse las numerosas diferencias, aunque ambas conservan la característica fundamental de ser TLR y un origen común.



Y no hay que olvidar que en esa época, Agfa se hacía competencia a sí misma con una cámara reflex más convencional, la Agfaflex (también conocida como Colorflex y/o Ambiflex) -inicialmente de un sólo objetivo fijo, pero a partir del modelo III con objetivos y visores intercambiables- aunque notablemente más cara.

 



 

Mi Flexilette

Tiene algunas manías relativas al despliegue del parasol del visor y, sobre todo, de la lupa: ignoro si son defectos de mi copia (S/N AG3516) o no, aunque el sistema no parece, en general, muy fiable. Por lo demás, la restringida y concentrada acumulación de mandos sobre el cilindro principal funciona sin problemas. Y el peso de 758 gramos exactamente (sin carrete), se hace notar. Echo en falta indicación de profundidad de campo sobre la escala de distancias, que ya era habitual en las cámaras y objetivos de los años 60, pero supongo que la propia configuración de los mandos de la Flexilette lo hacía bastante difícil.

Como curiosidad, en la parte interna de la tapa trasera (en la parte ocupada por la bobina de recogida, a la izquierda, ya que el carrete está a la derecha) hay una pegatina con los datos del vendedor alemán de la cámara, en la que puede leerse: Ihr Fachsgeschäft seit 1930 (Tu tienda especializada desde 1930; pronto cumplirá un siglo) Heini Weber KASSEL WILHELMSSTRASSE MELSUNGEN AM MARKT; introduciendo esos datos en Google Earth he podido comprobar que ese comercio fotográfico aún existe -reconvertido en Optica- y está ubicado en una preciosa plaza comercial de estilo inconfundiblemente alemán.

 




Siempre agradeciendo a Butkus la extensa base de datos de manuales de cámaras.

 

 











     






lunes, 4 de noviembre de 2024

Kine Exakta


En la anterior entrada, la dedicada a la Exakta VPExakta Standard), ya se mencionaba que era la predecesora de la que, por sí misma, constituye un referente principal en la historia de la fotografía del siglo XX: la Kine Exakta.

En realidad, se trata de la primera cámara que, al heredar los conceptos básicos de la Exakta VP (reflex monocular de objetivos intercambiables y obturador planofocal), se convertía en la primera de este tipo para el formato 135 que por entonces se consideraba "superminiatura" (el formato VP, de 4x6,5cm. era "miniatura") y su nombre, Kine, recuerda, precisamente, que utiliza el formato de la película de cine (24x36mm.). Es cierto que existió una cámara, la Sport, desarrollada por GOMZ en la Unión Soviética que disputa a la Kine Exakta el título de ser la primera de esas características (en realidad están a la par, de forma totalmente independiente la una de la otra; curiosamente, mientras puede adquirirse una Kine Exakta por menos de 200 €, es difícil encontrar una Sport por menos de 1.000 €) pero por repercusión mundial y como modelo de futuro, el titulo corresponde, sin duda, a la Kine Exakta. Debido a su éxito, la Kine Exakta se vio sucedida por varios modelos (Exakta II, Exakta Varex, Exakta VX 1000 etc.) que se mantuvieron en producción y con notable éxito hasta la década de los años 60, treinta años después del lanzamiento de la Kine Exakta en 1936. Otro de los aspectos innovadores e la Kine Exakta es que logró convertirse -sucediendo también en ésto a la Exakta VP- en una cámara de sistema, y ello  debido no sólo a la cantidad de objetivos disponibles de diversos fabricantes si no, sobre todo, a la cantidad de accesorios disponibles que Ihagee produjo para ella -incluidos una gran variedad de visores intercambiables- lo que hacía de la Kine Exakta una herramienta polivalente y adecuada para los más diversos campos de la fotografía (retrato, prensa, deportes, macrofotografía, microscopía, astronomía, etc.). Aunque ese mismo éxito fué precisamente la clave de su final: la Exakta VX 1000 de 1969 se parecía muchísimo a la primera Kine Exakta; era patente una falta de evolución tecnológica durante esos treinta años y la situación empresarial en la Alemania Oriental (D.D.R.) no propiciaba precisamente la necesaria innovación y desarrollo evolutivo. Por otra parte, la tecnología de la industria fotográfica  japonesa de esa época barrió no sólo a la Exakta si no también a toda la industria fotográfica de la Alemania occidental (Zeiss, Rollei y Voigtlander tuvieron que unir sus fuerzas y aún así sucumbieron); para la década de los 70, Nikon, Canon, Pentax o Minolta (por no hablar de suministradores y fabricantes básicos y universales, como Cosina) eran dueños absolutos del panorama fotográfico a nivel mundial.

Mis Kine Exakta.

Las Exakta tuvieron una serie de variantes y actualizaciones aún dentro de cada modelo, pero para la primera, la Kine Exakta, existe una clara división en dos grupos: las previas y las posteriores a la guerra; desde la primavera de 1936 hasta Marzo de 1940 en que se suspendió su producción regular (Ihagee como empresa se dedicó a partir de entonces a la fabricación de óptica de precisión para artillería, fundamentalmente) constituyen el primer grupo. Durante la guerra (1940-45) se produjeron muy pocas unidades -mediante autorización expresa- para autoridades políticas y militares de la Alemania de la época y también para los corresponsales de guerra alemanes. La producción posterior a la guerra se reinició en una fecha tan temprana como Agosto de 1945 y ello gracias a que Ihagee había almacenado y diversificado los componentes básicos de la cámara, ya que su fábrica central fue totalmente destruida en el arrasador bombardeo de Dresde (del 13 al 15 de Febrero de 1945); son las que constituyen el segundo grupo. La Kine Exakta fue sucedida por la Exakta II en 1949. Ninguna de estas dos últimas fue ya responsabilidad de su creador, Karl Nüchterlein, que como ya se mencionó en la entrada correspondiente a la VP ExaktaExakta Standard), había muerto en combate como soldado del ejército alemán en los Balcanes,  en Abril de 1945.

La primera Kine Exakta con la que pude hacerme fue una post-war, o sea, de las fabricadas con posterioridad a 1945, (número de serie 624611), que debe haberse fabricado antes de 1948 y que pertenece al grupo de las consideradas como reparación de guerra a Rusia (y a algunas también exportadas a países de la Europa occidental) y que, por ello, se rotularon Exacta (no Exakta); esa fecha (1948) parece ajustarse al número de serie (3002104) del objetivo Zeiss Tessar  5 cm. f/3,5 que traía montado. Se corresponde con el modelo 7 del catálogo de Hummel.

Su estado era algo precario; ópticamente aceptable (aunque el espejo ha conocido tiempos mejores), pero mecánicamente presentaba carencias evidentes; supongo que algunas debidas a una larga inactividad y otras debidas a una mala manipulación; las primeras las puede solventar tras un desmontado parcial, limpieza y engrasado tanto del selector de velocidades principal como del tren de velocidades de retardo (y velocidades lentas) donde pude apreciar una pieza rota (supongo que debido a la segunda razón). En resumen, en su estado actual la cámara funciona bien en su selector de velocidades principal (velocidades rápidas), de 1/25 seg. a 1/1000 de seg. más B y Z (T). Del selector de velocidades lentas, también funciona como tal en las velocidades lentas, de 1/5 seg. a 12 seg. (números negros), pero no funciona la selección de velocidades con retardo (números rojos), ya que sea cual sea el tiempo seleccionado, el espejo se levanta y se acciona el obturador inmediatamente después de apretar el botón de disparo, no después del retardo, es decir, realmente es el temporizador lo que no funciona. Si alguna vez dispongo de la suficiente información, material de repuesto -y ganas- intentaría su reparación.

La segunda tiene el número de serie 610572 y, según donde busque la correspondencia para ese número de serie en una fecha de fabricación, resulta que ésta puede ser anterior (del último modelo, fabricada en el período 1938-40/43; 006 en el catálogo de Hummel) o posterior a la guerra (1945-46); los detalles complementarios para intentar datarla tampoco ayudan mucho: tiene, efectivamente un tercer contacto de flash para asegurar el flash tipo Vacublitz en el lado derecho de la cámara como los últimos modelos anteriores a la guerra, pero también tiene otros dos en el lado izquierdo, cosa que no he visto en ninguna imagen de las que he visto como tales Kine Exakta, y propia del posterior modelo Varex (a partir de 1950); por lo que parece, no es fácil establecer una correspondencia de números de serie y fechas de fabricación exactas para la Kine Exakta, sobre todo en este período; en todo caso, como ya he mencionado, las primeras fabricadas tras la guerra lo fueron con piezas y material almacenado por Ihagee cuando finalizó la producción regular en 1940.

Por lo demás, y salvo un punto de pérdida de plateado en el espejo (que, en general, también denota el paso del tiempo) tanto la parte mecánica (carga,obturación en tiempos cortos y largos y temporizador) como el estado general (aspecto, cromados, piel) se encuentran en un estado bastante aceptable; no fue necesario si siquiera un engrasado (y menos un desmontaje parcial, siempre peligroso: si funciona ¡no lo toques!). También presenta el logo de la empresa (Ihagee) grabado en la piel de la parte posterior (creo que es una característica de las cámaras previas a la guerra y que las posteriores a la guerra no mantuvieron).  En general, presenta un buen estado de conservación (bastante mejor que la primera) y es la que he decidido mantener en la vitrina de las Exa/Exakta, montando el Zeiss Tessar 3,5/50 que traía la primera Kine Exakta ya esta segunda vino sin objetivo (estoy detrás de un Victar 2,9/5cm. de la firma Ludwig -precedente inmediato del Meritar 2,9/50 y seguramente un triplete muy similar- por aquello de montar en cada cámara al menos un objetivo coetáneo, aunque en las Kine Exakta se puede, evidentemente, montar cualquier objetivo posterior de bayoneta Exakta, como puede verse en una de las fotos adjuntas, con el mítico Flektogon 4,0/20mm.).






martes, 20 de febrero de 2024

Agfa Karat 12

 


 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Agfa es, desde 1925, una de las marcas punteras en fotografía a nivel mundial, si bien igualmente y a menudo se la ha considerado una segunda marca; en realidad durante buena parte del siglo pasado fue competencia directa del gigante Kodak y muchas de sus respuestas tecnológicas a ese gigante no son desdeñables y frecuentemente, originales e innovadoras, como es el caso de las Karat (Quilate; que significa tanto unidad de peso en piedras preciosas o pureza de aleación de oro como grado de perfección de algo inmaterial; es palabra de origen árabe). Las Karat pretendieron ser la respuesta a las Kodak Retina del doctor Nagel.

Agfa  (abreviatura  de Aktien-Gesellschaft für Anilin-Fabrikation, Sociedad Anónima para la fabricación de anilina)se fundó en 1867, por los químicos Paul Mendelssohn Bartholdy y Carl Alexander von Martius, ambos hijos de ilustres progenitores; el primero -los melómanos habrán ya sospechado- hijo del músico y compositor Félix Mendelssohn Bartholdy  y el segundo hijo del explorador y botánico Carl Friedich Philipp von Martius; su negocio inicial -como se desprende claramente del nombre de la empresa- se basaba en la fabricación de tintes de anilina, pero en 1887 y por impulso de la química Momme Andresen, se lanzaron al incipiente campo de la fotoquímica y la fotografía; su primer éxito en este campo fue un producto cuyo nombre  pervive a día de hoy: el revelador fotográfico Rodinal. En 1910 su fábrica de película fotográfica en Wolfen (Alemania) era la segunda más grande del mundo (la primera continuó siendo la de Kodak en Rochester (EE.UU.)). En 1925 y como resultado de la gran fusión corporativa y la creación de la Interessen-Gemeinschaft Farbenindustrie (IG Farben), Agfa adquirió la empresa Rietzschel que fabricaba cámaras fotográficas en Munich (Baviera), siguiendo así el modelo  de fotografía global de Kodak.

Agfa continuó fabricando las cámaras Rietzschel con su propio nombre y pronto diversificó su producción fabricando desde  baratas cámaras de cajón (Box) hasta cámaras de placa en formato 6x9 y 9x12 y cámaras de rollo en formato 120 culminando en la Agfa Standard de 1933 (clara heredera de los proyectos de Rietzschel previos a su adquisición por Agfa) en varios tamaños, todos ellos de formato medio (116 y 120). 

En 1936 ó 1937 (según la fuente consultada) Agfa lanzó su primera cámara para el que luego sería formato universal ó 135 (24x36mm.): la Agfa Karat de primera generación. Son estas cámaras Karat de primera generación unos encantadores productos de ingeniería sencilla pero de soluciones avanzadas; eran, como su competencia directa, las Kodak Retina I, cámaras desplegables de fuelle, pero con una distinción única respecto a las Kodak Retina o cualquier otra cámara coetánea de formato 135: un ingenioso sistema de cartuchos (que Agfa recuperó en la década de los 60 con el nombre de Agfa Rapid) que evitaba la necesidad del rebobinado final una vez expuesto el negativo; este sistema tenía otra serie de ventajas tales como evitar la inutilización general de un carrete por la apertura accidental de la cámara (se perdían sólo uno o dos fotogramas) y que la carga de película era mucho más sencilla y rápida. Tenía un sólo inconveniente (que razonadamente los encargados del marketing de Agfa vendían como ventaja para usuarios aficionados y que querían ver inmediatamente el resultado de sus tomas sin necesidad de esperar hasta completar las 24 ó 36 exposiciones) y era que la longitud del carrete estaba limitada a 60cm. ó 12 fotogramas (no 36 como era ya normal en esa época), lo cual era debido a la limitación del sistema de arrastre del negativo. De esta primera generación de Karat había varios modelos y el más avanzado, el Karat 3,5 (de 1939) montaba un obturador Compur ó Compur-Rapid (hasta 1/300 seg. ó hasta 1/500 seg.) y un competente Solinar (la versión Tessar de Agfa) de 50mm y f/3.5 (que da nombre al modelo).

Ese mismo año, 1939, Agfa lanzó la segunda generación de Karat que implicó un profundo rediseño y la incorporación de un telémetro, también original (no de parche, como la mayoría) y que pretendió ser competencia directa de la Kodak Retina II, de 1936-37. A uno de los modelos de ésta generación (que posteriormente se denominó Karat 12, para diferenciarla de la Karat 36, que utilizaba el clásico cartucho rebobinable de 36 exposiciones) es a la que corresponde a la presente reseña; esta segunda generación (que comenzó justo antes de la II Guerra Mundial, aunque algunas fuentes aseguran que comenzó a fabricarse en 1941)  se prolongó hasta los años de la inmediata posguerra y la versión tope de esta generación tiene las siguientes características:

-12 Exposiciones de formato 135 en cartuchos Rapid (igual que la primera generación, y que entonces no se denominaban Rapid sino simplemente cartuchos Agfa-Karat).

-Obturador Compur-Rapid (B - 1-1/500seg.).

-Objetivo Xenar 2,8/50mm. (Super-Xenar de 5 elementos); sin recubrir en los primeros modelos y recubierto (triángulo rojo) en los últimos de posguerra.

-Telémetro acoplado de imagen partida.

-Palanca de avance (en esa época -y hasta los años 50- la Kodak Retina II careció de ella, utilizando una perilla cilíndrica y moleteada de avance, como era usual en la época. Es cierto que la palanca de esta Karat es algo particular y de avance en sentido inverso a las que posteriormente fueron habituales). 

-Los últimos modelos disponen de zapata fría y acople de flash con conexión PC. 

Curiosamente existen modelos de la inmediata posguerra (1946) que disponen de la zapata para flash (u otro accesorio) pero no de la conexión PC; puesto que la cámara dispone de telémetro no sé a que otro accesorio podría estar destinada la zapata (aunque a mí me sirva para anclar un exposímetro digital); tengo dos cámaras de este tipo (una con y otra sin conexión flash PC) y una tercera de anteguerra 1.939/41? que lamentablemente tiene el control de enfoque congelado debido seguramente a la famosa grasa verde con la que he tenido que lidiar en otras cámaras de Agfa (las grasa se solidifica en el helicoide de enfoque e impide su giro) que, hasta ahora, a resistido mis intentos de devolverla a la vida (incluyendo un semidesmontaje de la óptica y el obturador.

Adjunto fotografías de las tres:

 

 


 







 

 



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Desde aquí mi agradecimiento a Cees-Jan de Hoog, tanto por el disfrute que proporciona su sitio web sobre cámaras antiguas  (http://www.cjs-classic-cameras.co.uk/index.html) -sintético y muy bien ordenado, además de extenso-  como por la atención que me ha dispensado siempre que le he consultado alguna cuestión o precisión técnica sobre alguna cámara en concreto. Uno de los pocos lugares en los que se menciona los objetivos  Schneider Super-Xenar, que ya cité en la entrada de la Exakta VP en este blog.

 

martes, 6 de julio de 2021

Exakta VP

 
No es necesario que nos pongamos serios -aunque estaría justificado- para hablar de la Exakta VP, una cámara que es pura historia de la fotografía; tanto Johan  Steenbergen, fundador y propietario de la compañía Ihagee Kamerawerk GmbH (refundada como Ihagee Kamerawerk Steenbergen & Co en 1918) como Karl Nüchterlein, que entró como mecánico en 1923 en Ihagee y que para 1933 ya era su jefe de diseño y desarrollo, son parte importante de esa historia; precisamente en ese último año se lanzaba al mercado la Exakta VP que es la primera cámara SLR (Single Lens Reflex - Réflex de un sólo objetivo) utilizando un formato de película entonces popular y parecido al 120 aunque algo menor: el formato 127; con sus 4 cm. de ancho, el formato del marco de la Exakta VP es de 4x6,5 cm (no de 4,5x6 cm como es habitual encontrar por error en alguna referencia; en realidad es de 4x6,3cm). Precisamente a ese formato debe la Exakta VP su apellido: era el formato Vest Pocket (Bolsillo de chaleco) en la denominación de Kodak y que se popularizó a nivel hoy inimaginable con la Kodak Vest Pocket, la cámara del soldado (de los oficiales, en realidad, pocos soldados serían propietarios de una), durante la I Guerra Mundial: lo más pequeño -lo suficientemente pequeño para que una cámara que utilizara ese formato cupiera en el bolsillo de un chaleco- utilizado hasta entonces, cuando comenzó a ganar terreno el formato 135 (24x36mm) derivado de la película utilizada en el cine; a día de hoy el formato 127 subsiste a duras penas (el resto de formatos ha desaparecido, salvo el 120 y el 135); precisamente para el entonces nuevo formato 135 el mismo Nüchterlein diseñó y lanzó al mercado, sólo tres años después, en 1936, la Kine Exakta, una versión reducida (no mucho menor, en realidad) de la Exakta VP que tendría aún más éxito y sucesión (Exakta Varex, VX, etc.). Pero esa es otra historia.
 
Placa en homenaje y memoria al creador de las Exakta, Karl Nüchterlein en la que puede leerse: Aquí estuvo ubicada desde 1945 a 1970 la fábrica de cámaras Ihagee, de Johan Steenbergen, donde se fabricó la Exakta, diseñada por Karl Nüchterlein (1904-1945) en 1936. Al ser la primera cámara réflex de pequeño formato, hizo que la industria de fabricación de cámaras de Dresde se hiciera famosa en todo el mundo (creo que podría ser una traducción correcta).
Hay que decir que Nüchterlein no llegó a conocer esa ubicación ya que desapareció en combate como soldado del ejército alemán en Abril de 1945, cerca del final de la II Guerra Mundial en Europa.
Y también que la placa menciona la Exakta para formato 135, la Kine Exakta, pero la Exakta VP es tres años anterior, con los mismos revolucionarios principios, aunque para el formato 127.
 
 

 
 
 

La Exakta VP (también denominada entonces Standard, en reconocimiento, supongo, a su voluntad de establecerse como patrón) marcó la mayoría de las referencias para ese tipo de cámara desde entonces hasta el día de hoy; hasta principios del siglo XXI no comenzó a abandonarse el espejo abatible del sistema reflex en muchas de las cámaras digitales, cámaras que algunos, precisamente por ello, denominan mirrorless (sin espejo). En realidad la Exakta VP constituyó una referencia o patrón no sólo por diseño y funcionalidad, también por su voluntad de constituir una verdadera cámara de sistema, ésto es, una cámara con los necesarios accesorios para hacer frente a distintos tipos de fotografía y en diversos campos; es cierto que hoy nos puede parecer que los accesorios de la Exakta VP son escasos y/o insuficientes, pero el simple hecho, por ejemplo,  de la posiblidad de intercambiar objetivos no era nada común en la época y la Exakta VP lo permitía (con las limitaciones que después veremos); la Exakta VP supuso, en resumen, una verdadera revolución en el mundo de la fotografía en 1933.

Existen muchas versiones de la Exakta VP que podemos agrupar en cuatro grandes familias: (1)(versión A) las carentes de velocidades lentas y retardo  (velocidades entre 1/25 seg. y 1/1000 seg. B y Z (T)), (2)(versiones B y C) las que disponían, además, de velocidades lentas (entre 1/10 seg. y 9 ó 12 seg.) y retardo , (3) las Nigth Exakta (con objetivos muy luminosos, de hasta f/2,0 ó f/1,9 ó en su focal estándar de 80mm) pero de montura incompatible con las vesiones anteriores y, finalmente, (4) las Exakta VP Junior, una versión simplificada, sin velocidades lentas y con 1/500 seg. como velocidad máxima. Habría que añadir que aunque en todas puede desmontarse el objetivo, hasta el modelo A.V2 (y en las primeras versiones de la B) la rosca era de 39,5x0,5mm. y en las posteriores pasó a ser de 39,8x0,75mm, lo que supone que los objetivos de uno y otro tipo no son intercambiables.

El manual de referencia de la Exakta VP (en inglés) puede encontarse tanto en el impagable sitio de Michael Butkus en formato pdf como en formato issuu en el sitio del notable coleccionista de las Exakta VP, Maurizio Frizziero, miembro del Exakta Circle, asociación que promueve la colección, uso y estudio histórico de las cámaras de Ihagee. Ambos sitios muestran aproximadamente el mismo manual de referencia, que cubre el funcionamiento de los modelos A, B y Junior, aunque el segundo tiene una presentación más amena. Siguiendo cualquiera de ellos podemos intentar volver a la vida a una Exakta VP que se mantenga en un estado de uso razonable, lo cual es poco frecuente.

La Exakta VP que tengo es una de las más comunes (por número de las fabricadas), una B.V4.2 (el modelo B tiene 6 versiones reconocidas y dentro de cada una existen subversiones) con las siguientes características distintivas sobre las ya reseñadas:

-S/N 488462 (año de fabricación estimado: 1.935/36)

-Objetivo Schneider-Kreuznach Xenar 2,8/75mm S/N 962794 (fecha de fabricación estimada: Agosto de 1.936)

-Avance de la película mediante palanca (a la izquierda, así como el botón de disparo, habitual en todas las Exakta; algunos aseguran que debido a que Nüchterlein era zurdo)

-Toma bipolar para flash Vacublitz tipo M (no PC) para 1/25 seg.

 

 
Mi Exakta VP con el protector de pantalla desplegado y el helicoide de enfoque igualmente desplegado hasta la posición de enfoque a infinito.  
(Pinchando en las imágenes se consigue una ampliación mayor).
 
 
Vista posterior. Puede apreciarse la pestaña central de despliegue del protector de pantalla, así como otra más pequeña (a la derecha) para desplegar la lupa. A la izquierda, la palanca de avance de película y el selector principal de velocidades; a la derecha, el selector de velocidades lentas (números negros, 1/10-12 seg.) y de velocidades lentas con retardo (números rojos, parcialmente decolorados, 1/10-6 seg.). Ambos selectores necesitan ser levantados para girar el dial y hacer coincidir el valor seleccionado con un punto de referencia. En la tapa posterior, la ventanita de comprobación del fotograma en curso, habitualmente cerrada.

 

Del objetivo que monta la cámara cabe mencionar que además de una notable apertura para esa focal en esa época, es un Schneider-Kreuznach Super-Xenar diseñado por Albrecht Wilhelm Tronnier en 1.935; un nuevo diseño con cinco elementos en  cuatro grupos, no uno de los muchos clones del Tessar, de cuatro elementos en tres grupos, como  el Xenar común (cuyo diseño, del propio Tronnier, databa de 1.926). Parece ser que, con anterioridad a la II Guerra Mundial, el Super-Xenar sólo se produjo en 50mm y 75mm de distancia focal. La propaganda de Schneider aseguraba que el objetivo corregía bastante el coma aún en una apertura relativa tan grande; lo cierto es que es un objetivo de gran personalidad por su mezcla de nitidez, suave desenfoque (bokeh) con un iris en círculo casi perfecto gracias a sus 15 (sí, 15) palas y una reproducción de color vívida que hoy podríamos denominar antigua; sin embargo, al carecer de cualquier tipo de recubrimiento, el contraste que ofrece es bastante bajo.


 

Prueba con el objetivo Xenar de la Exakta VP adaptado a una Sony A7 II, a plena apertura, f/2,8 (la edición incluye únicamente el recorte y un ajuste simple de gamma y contraste).
(Pinchando en la imagen se consigue una ampliación mayor).

 

Mi Exakta VP llegó con varios defectos, el principal es que tiene un golpe en la pantalla de enfoque y dos grietas importantes, aunque sigue siendo posible enfocar con ella; he procurado minimizar los daños (sustituir la pantalla lo veo inasequible) mediante una gota de adhesivo epoxy (Araldite) en el centro del golpe. Por otra parte, ni las velocidades ni el temporizador funcionaban correctamente; unas gotas de gasolina de mechero en ambos mecanismos consigueron que comenzaran a funcionar, pero tuve que desmontar parcialmente el tren de engranajes izquierdo (selector de velocidades  y palanca de avance de película) para conseguir que finalmente funcionaran razonablemente tanto el selector de velocidades principal como el temporizador y selector de velocidades lentas; aún así, supogo que los tiempos obtenidos serán, en general, más largos que los valores nominales. La cortinilla del obturador se encuentra aparentemente bien, sin arrugas ni perforaciones, lo cual tampoco es habitual en éstas cámaras. El espejo está razonablemente bien, salvo algún punto de carencia en el plateado. Con todo, contento de la adquisición, vistos los precios a que se cotizan las Exakta VP: las desastrosas e inutilizables no bajan de 150 €.

Entre las variadas peculiaridades de esta cámara -y de las Exakta, en general-  está la particular distinción entre velocidades lentas y velocidades lentas con retardo, que me llevó un rato largo averiguar con anterioridad (incluso leyendo el manual) para las posteriores Exakta Varex y que es exactamente igual en la Exakta VP; por resumirlo: cualquier valor de selección de una velocidad lenta con retardo (números rojos) sirve como retardo, sin más, de cualquier velocidad rápida excepto B ó Z(T); sin embargo, si seleccionamos B ó Z(T), además del retardo obtendremos un tiempo de exposición de acuerdo al valor elegido (1/10 - 6 seg). Seleccionando igualmente B ó Z(T) y una velocidad lenta (números negros), lo que obtendremos será exactamente la velocidad lenta seleccionada 1/10-12 seg.; en ambos casos el proceso es: primero cargar el obturador mediante el avance de la película (dos recorridos y algo), en segundo lugar, girar a la derecha a tope el dial de velocidades lentas y rápidas (situado a la derecha del fotógrafo que sujeta la cámara)y, finalmente, apretar el botón de disparo. En el caso de velocidades con retardo, el botón de disparo liberará el temporizador y al final de su tiempo de demora (unos 15 segundos) el obturador se abrirá bien el tiempo seleccionado de la velocidades rápidas, o bien el de la velocidad lenta con retardo seleccionada en los números rojos (con  B ó Z(T) en las velocidades rápidas). El proceso es semejante para las velocidades lentas sin retardo, salvo que habremos seleccionado uno de los valores 1/10-12 seg, en los números negros. Esta es, ya digo, la versión resumida, aunque una vez entendido el proceso parece de lo más natural dentro de ser una verdadera rareza; se tarda bastante más en intentar explicarlo que en hacerlo.

Dejando aparte el proceso de carga y funcionamiento efectivo (lo cual aún tengo pendiente), puedo comentar algunas de sus características funcionales principales:

-El enfoque corre a cargo de un helicoide de enfoque accionado por el anillo más próximo al cuerpo de la cámara; el objetivo sólo lleva incorporado el anillo selector de diafragma, de 1/2,8 a 1/16, continuo. Ese helicoide consta de un recorrido en dos fases: en la primera se despliega hasta un punto en que se logra llevar al objetivo a la posición de infinito, posición en la que una palanquita asegura su inmovilización y enclavamiento. Esto tiene por objeto lograr una mayor compacidad en la posición de transporte, dado que la distancia de registro de la cámara (del sistema Exakta VP) es de 72mm (según mediciones aproximadas; no he encontrado el dato preciso en ningún sitio). A partir de ese punto de enclavamiento en la posición de infinito (sin llegar al cual el disparador permanece bloqueado), levantando la mencionada palanca, podemos seguir girando el anillo de enfoque y desplegando el segundo tramo del helicoide hasta la posición de enfoque más cercano posible (algo menos de un metro).

-El proceso de carga a cargo de la palanca de carga requiere de dos avances completos y un tercer avance parcial para conseguir que el espejo baje completamente, lo cual desbloquea el disparador.

-El despliegue de los protectores laterales de la pantalla de enfoque se logra mediante un pequeña pestaña posterior; otra pestañita accesible sólo en esa posición desplegada permite poner en funcionamiento una pequeña lupa sobre la pantalla de enfoque, para hacer éste más preciso. El plegado requiere un orden determinado: posterior, derecha, inquierda y tapa superior que cierra el conjunto, quedando asegurado por la pestaña utilizada inicialmente para el despliegue. Existe una posición en la cual, plegando el frontal (la parte interna de la tapa, en posición plegada), se habilita un visor directo de tipo deportivo.

-La ventanita de visualización de fotograma en curso de la tapa trasera se habilita con una oportuna palanquita que desplaza a la izquierda la tapa, quedando la ventana generalmente cerrada mediante un resorte interno.

Antes de lanzarme, como he dicho, a una prueba definitiva en el supuesto de que probablemente sea factible, he dedicado bastante de mi tiempo a lo improbable ó difícil, que resulta bastante más entretenido. Resulta que, como ya he mencionado, la Exakta VP permitía el cambio de objetivos, algo bastante usual hoy en día para cualquier cámara de sistema reflex, pero ¿cuales eran los objetivos que la Exakta VP podía usar en su tiempo?; lo cierto es que la gama era bastante limitada. La distancia focal estándar del sistema era de 7,5cm para la cual sí se fabricaron varios modelos por  diversas firmas (Topaz de la francesa Boyer, Exaktar de la propia Ihagee y también de Meyer, Xenar de Schneider, Flor de Som Berthiot y el omnipresente Tessar de Zeiss) en distintas aperturas que iban de f/2,8 a f/4,5. Caso aparte eran los destinados a la Night Exakta en aperturas que oscilaban entre f/1,9 y f/2,0 y distancia focal que era comunmente de 8 cm (Super Six de Dallmeyer, Primoplan de Meyer, Xenon de Schneider y Biotar de Zeiss, lo más avanzado de la época en cuanto a objetivos) que como ya he mencionado, disponían de un soporte de montaje de mayor diámetro y, por tanto, eran incompatibles con la montura de los modelos A, B, C y Junior. Pero para la Exakta VP no existían muchos teleobjetivos y, menos aún, granangulares (recomiendo la excelente monografía Exakta Collection de Clément Aguila y Michel Rouah para información complementaria al respecto); tampoco sé que exista un objetivo de focal inferior a los 5,5cm f/8 del Tessar Wide-angle que no deja de ser un Tessar y, además, poco gran angular (es equivalente a un 35mm en formato 135). En cualquier caso, si se encuentran de forma ocasional algunos de los objetivos destinados en origen a la Exakta VP en el mercado de segunda mano lo son a precios de coleccionista, o sea, inabordables (aún más que los de las propia cámara Exakta VP). Lo cual me hizo cavilar sobre la posibilidad de utilizar objetivos de sistemas posteriores, especialmente los de formato medio, aproximados en cuanto a distancia de registro y campo cubierto. De los que dispongo, hube descartar unos excelentes candidatos, los objetivos de la Mamiya 645, debido a que poseen una distancia de registro inferior (63,3mm) a los 72mm de la Exakta VP. Quedaban los objetivos del sistema Pentacon Six, cuya distancia de registro es algo superior (74,1mm) pero, teniendo en cuenta que todos los adaptadores que conozco para este sistema lo son para sistemas 135 (con distancias de registro de entre 40 y 50mm) resulta que tampoco resultarían utilizables, salvo para macro, por el aumento en la distancia de separación que aporta el propio adaptador; necesitaría una adaptador directo de Pentacon Six a M40x0,75mm y no creo que tal adaptador exista (o que sea fácil de construir).

Llegué así, por descarte, a los únicos objetivos que he encontrado factible usar en la Exakta VP (todos ellos en el rango de tele corto o tele): los objetivos de ampliadora de focales superiores a 80mm y destinados a ampliación de negativos de 6x6 o formatos superiores y, especialmente, unos objetivos Tominon destinados a cámaras reproductoras de Polaroid; son objetivos de formula Tessar (o Tessar invertido) que gozan de buena reputación en el campo de la fotografía macro; tengo los de 75mm (descartable a priori, en esa distancia focal ya está el Xenar que viene con la cámara), de 105mm y de 135mm, todos f/4,5. Estos objetivos Tominon presentan una ventaja sustancial: tienen una rosca de montaje de 40x0,75mm correspondiente a obturadores Copal #1 (recordemos que la rosca de montaje de la Exakta VP es de 39,8x0,75mm); ¿podrían montarse los Tominon en la Exakta VP?: más o menos. Hube de recurrir a la utilización del tramo más corto posible de los tubos de extensión de las Exakta de 135 (Varex, VX, etc.) que -¿por casualidad?- tienen también una rosca interna de 40x0,75mm; así como los Tominon no pueden roscarse a fondo directamente en la Exakta VP, sí se pueden roscar en ese tubo de extensión y el propio tubo de extensión también se puede roscar -ignoro el motivo, será por tolerancia sobre las medidas teóricas-en la Exakta VP. Hay que decir que en todos los casos (tanto con los Tominon como con el resto de objetivos de ampliadora) hay que recurrir, además, a los necesarios tramos de tubos de extensión que dejen (más o menos; la escala de las distancias de  enfoque deja de ser informativa y de corresponderse con la realidad, pero para algo la Exakta VP es réflex) el objetivo enfocando a infinito en el primer despliegue del helicoide (posición a alcanzar necesariamente, recordemos, para habilitar el funcionamiento el disparador). 

Ese es, en resumen, el estado actual de mi intento de procurar ampliar el parque de objetivos para la Exakta VP: gran angulares descartados, teleobjetivos  cortos (los Tominon 105mm y 135mm) y los objetivos de ampliación de 80mm en adelante (también dispongo de un adaptador de M39 y M42 a M40x0,75mm) hasta, por ejemplo, un Schneider Componon de 150mm. f/5,6 (equivalente a un 100mm en 135)o un Meopta Meopar de 180mm f/5,6 (equivalente a un 135mm en 135)que no imagino como quedarán una vez montados (seguramente algo fronkostinos).